El Skoda Scala es como ese compi de clase que no hace ruido pero saca matrícula de honor. Un compacto con pinta discreta pero equipadísimo por dentro, que te da todo lo que necesitas (y un poco más) sin vaciarte el bolsillo.
¿Tecnología? De sobra: pantalla táctil de 8,25", SmartLink inalámbrico con Apple CarPlay y Android Auto, cámara de visión trasera, y un arsenal de asistentes que te hacen la vida más fácil (y más segura), como el asistente de luz de carretera, el de mantenimiento en carril, o el clásico pero siempre útil control de crucero.
¿Confort? Ni te cuento. Climatizador bizona, arranque y acceso sin llave, asientos regulables, maletero iluminado y volante multifunción que puedes ajustar a tu gusto. ¿Y si eres de los que viajan con la casa a cuestas? El Scala te cuida con bandeja cubremaletero, red de sujeción y hasta portagafas.
Todo esto aderezado con un diseño sobrio pero elegante, luces LED por todos lados, y detalles cromados que le dan ese toque "chic". El Scala es, en resumen, el coche perfecto para quien quiere tenerlo todo... sin tener que pedir un préstamo para conseguirlo.