Contacto
+34 911 673 361
ventas@driverevel.com
Si el volante vibra al conducir, puede ser señal de problemas en neumáticos, frenos o suspensión, y atenderlo a tiempo es clave para evitar riesgos.
Cuando el volante vibra, ya sea a baja velocidad, al frenar o al alcanzar 100 km/h, no es solo una molestia, es un síntoma de que algo no va bien. Desde neumáticos desequilibrados hasta problemas en frenos o suspensión, identificar la causa a tiempo puede evitar daños mayores y garantizar tu seguridad.
Cuando el volante vibra a baja velocidad, suele ser señal de que algo no está funcionando correctamente en el sistema del coche. Este problema puede ser originado por un desgaste irregular de los neumáticos, piezas de la suspensión deterioradas o incluso por una mala alineación. Si has notado que el volante vibra al girar en parado, puede que los silentblocks o bujes estén en mal estado, lo que genera esas vibraciones incómodas.
Entre las razones más comunes de estas vibraciones se encuentran:
Es importante que no pases por alto estos síntomas. Aunque al principio las vibraciones puedan parecer inofensivas, si no se solucionan, pueden generar un desgaste mayor en otros elementos y, eventualmente, en el sistema completo.
Esa sensación de que el volante vibra al girar en parado es más común de lo que parece, y las causas suelen estar relacionadas con el sistema de dirección. En coches con dirección asistida hidráulica, un nivel bajo de líquido puede ser el culpable, ya que el sistema necesita ese fluido para suavizar el movimiento. Si el problema persiste, también es posible que el desgaste de los silentblocks esté influyendo, transmitiendo las vibraciones directamente al volante.
Además, los soportes del motor desgastados pueden ser otra razón. Estos soportes, al estar deteriorados, no absorben correctamente las vibraciones generadas por el motor, lo que se traduce en una conducción más incómoda. En cualquier caso, prestar atención a estas señales y realizar un mantenimiento adecuado puede evitar problemas mayores.
El desgaste desigual de los neumáticos puede ser una de las causas más frecuentes de que el volante vibre a 100 km/h o incluso a velocidades mayores. Este tipo de desgaste suele estar relacionado con problemas en la alineación de las ruedas, presión incorrecta en los neumáticos o componentes de la suspensión desgastados. Conducir así no solo afecta la comodidad, sino también la seguridad, ya que el coche pierde estabilidad.
Si notas que tu coche vibra a partir de 100 km/h, es importante revisar los neumáticos. Comprueba si hay zonas más desgastadas y asegúrate de que están correctamente equilibrados. A veces, incluso con ruedas equilibradas, sigue vibrando. En esos casos, el problema puede estar en la deformación de los neumáticos o en algún fallo interno del sistema de suspensión.
Conducir con el volante desviado es incómodo y peligroso. Si además el volante vibra a alta velocidad, el problema podría estar en la alineación de las ruedas. Esto suele ser causado por impactos contra bordillos, golpes en baches profundos o desgaste en los componentes de la suspensión.
Revisar y corregir la alineación puede solucionar varios problemas, como:
Si notas que el volante “tira” hacia un lado, lo mejor es no dejarlo pasar y acudir a un taller especializado.
Hay ciertas señales que no podemos ignorar si queremos mantener el coche en buen estado. Por ejemplo, si tiembla el volante del coche al acelerar o al conducir en determinadas velocidades, podría tratarse de un problema en el sistema de dirección o incluso en los frenos. También, si el coche vibra al subir cuestas, la causa puede estar en la transmisión o en los soportes del motor.
Otro fallo común es el desequilibrio de las ruedas. Este problema no solo hace que el volante vibre, sino que también puede provocar vibraciones más intensas cuando se superan los 120 o 140 km/h. Además, los discos de freno en mal estado generan temblores cuando se pisa el pedal, lo que afecta tanto al volante como a la seguridad del coche.
Cuando los silentblocks están desgastados, las vibraciones del motor o del sistema de suspensión se transmiten al volante y al chasis. Si notas que el volante vibra al girar en parado o que vibra el coche cuando aceleras, es posible que los silentblocks sean los culpables. La mejor solución es reemplazarlos, ya que estas piezas son clave para la estabilidad y la comodidad al conducir.
A veces, incluso después de equilibrar las ruedas, el coche sigue vibrando. En ese caso, las causas pueden ser más complejas. Los neumáticos deformados, los discos de freno en mal estado o que los componentes de la suspensión estén desgastados son problemas que requieren una revisión exhaustiva.
No ignores estas señales. Un diagnóstico temprano puede evitar daños mayores y garantizar una conducción más segura y cómoda.
Hacerse un REVEL es sencillo: elige tu coche, contrata online en unos minutos y te lo entregamos en pocos días en la puerta de tu casa. Después disfruta de tu nuevo coche pagando una cuota mensual fija con todo incluido.
Contrata online en pocos minutos
con nuestro proceso 100% digital.
Entrega gratuita
en tu casa, tu oficina o donde tú quieras.
Escoge la permanencia que prefieras
entre 12 o 36 meses, según lo que mejor se adapte a ti.
Sin entrada ni letra pequeña,
paga mes a mes una sola cuota mensual que incluye todo.
La cuota mensual de tu suscripción incluye todo lo que necesitas para disfrutar de tu coche. Sin sorpresas ni gastos imprevistos. Solo tendrás que conducir.
Queremos que conducir un REVEL sea sostenible y respetuoso con el planeta. Por ello participamos en varios proyectos de reforestación de bosques en nuestro país para compensar tus emisiones de CO₂.